jueves, 11 de septiembre de 2014

Dejando Puno... hacia Cusco

5-9-14
 
Y finalmente, salimos de Puno! 
 




Vamos, subiendo la cuesta...., como diría Serrat.

Adios, lago Titicaca!  El origen de la civilización inca.
 
 
Entrando a Juliaca.
 


 
 

El tren de carga, que pasa por el medio de la ciudad... entre los puestos callejeros..

El tren ya pasó..  se reanuda el ritmo frenético.

Impresiones de Juliaca.



 
Ahi viene el repartidor de carnes......................
 
 
Las callecitas de los pueblos que vamos pasando... 
 

Seguimos camino... y comenzamos  a ver las primeras nieves.
 
 
Siguen las moto taxis por la ruta.... a 20 km/h..

Vamos subiendo.  Pero ya no tenemos que tomar las Soroche Pills.. tenemos casi un mes de acostumbramiento a las alturas..  Ya no nos afectan, graciadió.



Hermosos y cuidados cultivos.  Toda la montaña está trabajada con "andenes", como los llaman acá..  Legado inca.  Hasta la cima!

Esto es lo que yo llamo "dormir como chanchos"!

Momia inca..   pero está viva!!!!  Como los dinosaurios de Susana..  ;)

Más motitos..

Propaganda política por todas partes.  Acá se pintan las casas completas! No hay cartelería.

Vemos varios bikers extranjeros realizando el tramo de regreso de Cusco.  Este viene bien cómodo, por cierto, con su bici ergonómica.


Vemos cada vez más vacas y ovejas en la zona.

Seguimos impresionándonos con los cultivos en altura..



 
Pero como no hay bien que dure 100 años.... se nos quedó la chata!!!!!!   En una subidaaaaaaa!!!  Y sin banquinaaaaaaaaaa!!!  


A 1 km de Cusipata.. un ínfimo pueblito inca.

Caminamos hacia atrás unos cuantos metros, donde habían unos cuantos autos estacionados.  Resultó que ese era el cementerio, y que estaban enterrando a uno que ya está mirando las margaritas desde abajo..  El sobrino de la afortunada, llevó a Fernando al Cusipata para buscar algún camión que nos pueda remolcar a lugar seguro.  No podíamos dejar la chata ahí, ya estaba oscureciendo y con la temeraria manera de manejar de los peruanos  - que no amainan ni cuando uno se para en la ruta con una bandera haciendo señas que disminuyan la velocidad - podíamos causar un accidente..
 
Pasamos la noche en Cusipata, y al día siguiente Fernando le desarmo todo el diferencial trasero (que es lo que se volvió a romper) para que la chata funcione con la tracción delantera (la Morocha es 4x4, por suerte),  esperando que así nos deje llegar a Cusco, donde nos dijeron que hay mayor posibilidad de conseguir talleres y repuestos..
 
6-9-14
 


Algunas imágenes de Cusipata.. antes de partir...


Este edificio descollaba en medio del pueblo.   

Comenzamos a ver plantaciones de eucaliptus globulus (el medicinal) por todas las laderas de las montañas.  Pensamos que era un plan para fijar las montañas.  Ya sabemos que en estas zonas, en época de lluvias, se producen aludes que barren con los pueblos de las laderas...

 
 
Ponen arbolitos hasta la cima!!  Quién subirá hasta allá???  Evidentemente son incas.. nadie más podría hacerlo.  Qué manejo de la montaña y sus inclinaciones que tienen!  Envidiable.
 
Seguimos con los andenes hechos en piedra, para realizar los cultivos.
 
Todo el trabajo con la tierra es manual.  Pequeñas parcelas, pero manual.
 
Pueblitos, iglesias mestizas, cultivos.
 
Siempre algún biker extranjero, que responde a nuestro saludo bocinero.
 
No lo pudimos confirmar aún, pero pensamos que las plantaciones de eucaliptus que vimos no son para lo que imaginábamos     - fijar las laderas- , sino que se explota la madera.  Todavía no sabemos qué uso le dan.  Mucha prolijidad para ordenar los tronquitos.
 
Continuamos con los pueblitos con calles no aptas para nuestro convoy..  Snif!
 
Entramos al depto de Cusco. 
 
La típica comidita en las calles..
 
Casas colgando de las montañas..  Pensemos en los aludes de verano... miren hacia la izquierda..
 
Ya se ve en las construcciones, la influencia colonial.
 
Lindo detalle.
 
Siguen las callecitas angostas..
 
Recién llegados al depto de Cusco, a unas  cuantas cuadras del centro, buscamos un taller que pudiera reparar la camioneta, un garage donde dejar la casa rodante, y un hotel donde pasar los días hasta que podamos armar de nuevo el convoy.
 
Esta fue nuestra primer noche en Cusco.  Y serán...

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